por CADTM
El 27 de enero, el FMI se felicitaba por su capacidad de respuesta a la catástrofe humanitaria en Haití, y decidía "ayuda de emergencia" de $ 102 millones [1]. Para el CADTM, este anuncio es escandaloso: lo que el FMI se atreve a llamar "ayuda" -un período de retraso en el pago de 5 años y medio sin aplicar intereses- es simplemente un préstamo cuyo principal deberá ser reembolsado. Lejos de ayudar a la reconstrucción de Haití, el préstamo va a producir un mayor empobrecimiento de la población de Haití al aumentar su deuda. ¡Como si el pueblo haitiano no hubiera sufrido lo suficiente, el FMI impone a cambio de los préstamos, incluidos en un programa de ajuste estructural, la aplicación de una serie de medidas anti-sociales tales como los aumentos de precios de la electricidad o la congelación de los salarios en la función pública! Al mismo tiempo, su director gerente Dominique Strauss-Kahn pidió, sin ninguna vergüenza, el establecimiento de un plan Marshall para Haití, que incluya la cancelación de su deuda.
El CADTM condena esta nueva maniobra del FMI para volver a legitimar su acción en Haití. Es hora de que el FMI rinda cuentas ante los haitianos con la cancelación inmediata de la deuda, devuelviendo todos los reembolsos y asumiendo el pago de reparaciones por todos los daños sufridos.
De hecho, el FMI y otros donantes como el Banco Mundial tienen una responsabilidad aplastante en la violación de los derechos humanos fundamentales de los haitianos. Durante varias décadas, han impuesto políticas neoliberales que han eliminado la suficiencia alimentaria del pueblo haitiano y lo ha hecho vulnerable a las conmociones externas, tales como el aumento de los precios agrícolas en los mercados internacionales. Estos acreedores tampoco dudaron en apoyar la dictadura de los Duvalier, aliados estratégicos de las potencias occidentales como Francia, que incluso ofrece ahora protección a Jean-Claude Duvalier en forma de asilo político. El pueblo haitiano sigue, mientras tanto, pagando la deuda contraída por una dictadura ilegítima ¡que se utilizó para su represión!
Son también las consideraciones geoestratégicas (la base para una gran parte de la deuda ilegítima en los países en desarrollo), las que han llevado al FMI y al Banco Mundial, controlado por los países occidentales, a detener los préstamos a Haití entre 2001 y 2004. De hecho, la supresión de la "ayuda" fue parte de los planes del gobierno de los EE.UU., que deliberadamente trataron de desestabilizar y derrocar al gobierno elegido de Haití. Como señaló Jeffrey Sachs, economista y ex asesor del FMI y el Banco Mundial, "los líderes norteamericanos eran plenamente conscientes de que el embargo de la ayuda podría llevar a una crisis de balanza de pagos, un aumento la inflación y la caída de los niveles de vida, que a su vez alimentarían la rebelión [contra el Presidente Aristide]".
Todos estos daños sufridos por el pueblo haitiano deben ser ahora reparados. Estas reparaciones se basan en la justicia y no en una supuesta generosidad de los países ricos.Es por ello que el CADTM exige un plan para Haití radicalmente diferente de la propuesta de Strauss-Kahn y el FMI. Este plan no debe comprender la cancelación de la deuda, sino solamente donaciones sin contrapartidas, concedidas como reparación por todos los daños sufridos.
El CADTM también apoya la idea de una acción legal contra el FMI, que según sus estatutos no puede hacer donaciones, para obligarlo a reparar los daños ocasionados en Haití y en todo el Sur.
Además de estas reparaciones, es indispensable:
- Cancelar total e incondicionalmente la deuda de Haití, como ha hecho Venezuela
- Reembolsar todo el dinero recibido como pago de la deuda porque la deuda original, la llamada deuda de la independencia, no tiene ningún valor legal y por lo tanto es nulo de pleno derecho
- Restituir a la población todos los bienes robados por los líderes de Haití y su entorno, sobre la base de la Convención de las Naciones Unidas contra la Corrupción.
[1] Nota de prensa del FMI en enero 27, 2010, "La Junta de Directores del FMI aprueba la ayuda de emergencia de 102 millones de dólares EE.UU. para Haití". www.imf.org/external/french/np/sec/pr/2010/pr1017f.htm
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